jueves, 17 de marzo de 2022

Vuelta al hogar (y un paseo por Belchite)

 A estas alturas me imaginaba con Jaime y Vladimir (entre otros) en nuestro laboratorio o clínica en Murcia con sede en Madrid, Barcelona o Paris experimentando. Con una clínica pagada o alquilada entre varios compañeros en la circular. 

Jaime conduce camiones en el aeropuerto. Yo hace año y medio amanecía en república checa, pasaba la mañana en Alemania, la tarde en Francia y dormía cerca de la frontera. Vladimir ni siquiera puede ahora enviarme Rublos para mi incipiente colección (ni hablar del SOEKS 01M que hace tiempo quería adquirir)

Escucho 'Crimson Wing' es de esas canciones que me hacen volver al hogar. Al refugio donde las cosas tenían sentido. 

Le hubiera preguntado a JJ Morosoli que piensa de lo de Ucrania. Compartía con el antaño una lógica aséptica a la par que precisa que alumbraba conclusiones esperadas como hijos pródigos. Hace lustros que no hablamos; imagino que igual que todos sigue de alguna manera ese devenir particular del cual se termina diciendo 'las vueltas que da la vida'

Hubiera en nuestra clínica habido alguna referencia a la atemporalidad en la que se recuesta la esencia de lo correcto y que transita por los cuadros de ciudades de principios del siglo XX al son de Debussy y Satie; habiendo nacido en los albores de la antropología y cambiando solo de traje para aterrizar en nuestros días siendo enriquecida por procedimientos de los cuales tendríamos el honor de ser partícipes.

Tengo la sensación  de que la vida cada vez me da pistas mas inequívocas de que, si bien existe una progresión valorable; la rapidez de la misma es algo que requiere de cierta urgencia y audacia. Ello no lleva implícito como condición necesaria tener la ansiedad cogida por la mano; hecho deseablemente prescindible. Yo no soy quien empero para exhortar a quienes son partícipes de mis fantasías. Los violines de 'the cinematic orchestra' parecen dar la entrada a la respuesta de '¿que hacer?...'

---

Belchite en esa historia de mierda que tiene este país (en casi todas sus acepciones) es algo tan incómodo como real. Belchite tiene el 'pueblo nuevo de Belchite' y el 'Pueblo viejo de Belchite' y pese a su estado deplorable (tan alejado de la conservación como abrazado al detritus histórico característico de España) muestra una historia que late aún a día de hoy.

Un francotirador apostado en el arco de la entrada del pueblo cubre junto con una ametralladora hasta la plaza del pueblo. Una niña cruza la calle de punta a punta, es alcanzada, olvidada y sobrevive hasta el día de hoy.

Una iglesia será la puerta de entrada a la toma casa por casa. Paredes acribilladas con agujeros de bala. Fosas en el olvido con casi 300 almas.

Y no puedo quitarme de la cabeza que esta mañana haya oidos vetustos que han escuchado las explosiones, olfatos que han olido los cuerpos arder, ojos que han visto la barbarie; cerebros que bajo llave guardan los recuerdos y corazones que mantienen el flujo necesario para nutrir dichos órganos; compartan conmigo su línea temporal, ajenos a que lo hacen.

No es que no me importe el conflicto que se desarrolla a unos apenas 3000 km de mi. Lo que ocurre es que no me acuerdo cuando se recogieron donaciones, se cubrió noticiarios, se envió desinteresadamente ayuda; se censuraron cadenas de televisión no afines, se acogieron masivamente refugiados y se sancionó internacionalmente a los paises como EEUU y España que participaron en la guerra de Irak y que costó casi 1 millón de muertos justificados por unas armas de destrucción masiva de las que a día de hoy se siguen sin tener noticias. El plato de hipocresía de cada día me tiene algo empachado, y que Julian Assange se case en prisión me parece tan obsceno como la actitud 'dadivosa' hacia Alan Turing.

Anotaciones: Por principio lógico si p --> q, implica que "p, entonces q" pero no que "q, luego p" Recalco anticipándome a la tradición propagandística de Eduardo Inda y cia que no me deja de parecer una barbaridad lo que está pasado. Me abruma empero la información increíblemente sesgada de la cobertura de recientes conflictos y me intriga su móvil. 

A veces la profunda certeza y la considerable incertidumbre obedecen a un razonamiento que no se quiere admitir. Como decía Fidel Castro Ruz... 'espero equivocarme'