martes, 12 de marzo de 2019

Sueño

De vuelta a la vida normal, hay que hacer las paces con el sueño.
La inercia es una relación delicada que debe articularse con el fin de sobrevivir.
Hacer un trato con el sueño para alejar el peligro. Y en la vuelta a la cotidianeidad siempre queda un cierto recelo (y una marca que en teoría desaparecerá paulatinamente en los ritmos circadianos).
PD: a veces cuando una mujer dice que no vale bastante, realmente de refiere que no vale bastante el sujeto en quien se refleja para ver si de hecho vale o no.

sábado, 9 de marzo de 2019

Hoy escribo solo para mi, y no se decir s ciencia cierta si me encuentro bien a veces por virtud o solo suerte.
Algo de sofoco ocupa la atmósfera de esta cabina. Anoto in situ que llevamos a cabo una travesía casi meridiana por la A10.
Dejo macerar algunas ideas. Evaluó temores y genialidades; tuteo a algunos miedos y de otros no quiero saber.
Quizás mas por lo que los demás piensen o por algún principio mental de indeterminación e incertidumbre, no se si me jode o no que se case mi nena la semana siguiente.
Igual que mi amigo Pedro. No se si le he tomado prestado ese interesante síntoma suyo de llenarse el futuro de cosas por hacer.
El de hacer un atalaya sobre un muro como mi soldado de invierno, intentaré declinarlo.
Hasta aquí, de momento...