Un fantasma de las navidades pasadas

Hicimos noche después de una larga jornada en un parking de camiones en la A36, en la frontera de Francia con Alemania.
A menudo al atravesar Francia, inocentemente pensaba en las batallas del Somme, Calais, Dunquerque, Verdún etc...
Y quizás el cansancio o algún hado del destino se conjuro en su planificador logístico para traerme a la mente aquella aparición y jugar me una mala pasada.
Los servicios de aquel área estaban cerrados y a mi me tocaba pertrecharme con una linterna y papel improvisado del WC. El resto lo dejo a la imaginación...
Mi malestar era considerable y terminado de subirme los pantalones un joven que no cumplía ni 18 años, ataviado con un uniforme jargolado me pregunto (como si lo supiera de alguna siniestra forma) -¿Y entonces dices que con ese camión recorres 90km en una hora? -
- Así es... Aunque en América recorren más... En Europa es bastante aburrido (le conteste, acarreando aún cierto malestar)
... Son bastantes horas de conducción y mucha gente de mi generación tiene que hacer esto, no le queda otra.
-Estarás ahorrando bastante dinero de todas formas
-La verdad es que si... Con los meses que eche la campaña pasada había pensado comprarme una Harley 883 o un Impreza GT turbo...
- Hostias que pasada! (Me sorprendió abruptamente el muchacho. Sus ojos lucían un brillo peculiar)
-Si... A veces pienso en bajarme de esto y salir a recorrer el mundo... Aunque quizás es más sensato ahorrar para una casa
- Una casa es una idea que suena genial
-(El entusiasmo del joven me producía una sensación algo intranquila que quizás se disimulaba por el todavía incómoda situación de haber tenido que condescender a mi naturaleza fisiológica imperativa)
... Podrías hacer casi lo que te diera la gana-
Al tanto reparé que sus botas tenían demasiado barro para lo poco que había llovido.
- Si, llevo un par de años queriendo pillar una furgo o un coche y salir x el mundo a ver festivales de música! Con 30 años ya está bien... Y no se si este es lugar para mi. Me gustaría centrarme más en la música y tengo abandonada la poesía
-(Nuevamente un regocijo y alborozo extraño parecían cruzar la tez, pálida de más del joven de mirada cristalina)
-... Creo que me lo merezco la verdad... Lo cierto es que no hay mucha gente dispuesta a trabajar duro para tener una buena vida.
- Aquí el muchacho moderó la intensidad de la excitación que todavía arrastraba y pude adivinar un rostro algo más polvoriento y manchado que el mío. Las luces de gálibo del frigo apenas conseguían arrancar un resquicio de brillo de la boca de ese Mosin-Nagant.
Cuando el devenir de los acontecimientos descargo instantáneamente su sentido furibundo en mi la visión se había desvanecido.
Solo me quedo esa mirada marcada [] que hasta el día de hoy me acompaña