Chris Cornell

No tengo ganas de pensar. Y espero quedar como un gilipollas al enterarme de que es un bulo. Sinceramente.

A veces me imagino a Dios como una especie de mediador del destino. Como la ONU o como alguien con más o menos responsabilidad que le toca mover la palanca y elegir que el trén mate a una persona o a 600. Entonces encuentro cierta justifiación a algunas cosas.

En este caso para mi es como una especie de jefe que se que está ahí. Pero también se que los jefes no tienen razón y a veces se equivocan.

Me encuentro como ante esas ocasiones en las que algun organo de gobierno toma una decisión cuanto menos cuestionable.
Esto puede significar también que a mi me falta información. Y como quien acciona la palanca para salvar a 1 y matar a 600... Bueno... Tu sabrás. No tengo nada que decir.

Por otro lado y si no es así. ¿estas seguro que las cosas no podrian haberse hecho de otra manera? ¿tenia que ser así?. No me respondas a mí. Respondete tu... Pero espero que la respuesta sea que es equivocación mía, sinó; comprendera que es perfectamente lícito mi destructivo estado anímico.

Sea cual fuere cualquiera de las dos situaciones, no pienso aceptarlo esta vez.
NOP...

No tengo ganas... me parece una gilipollez. Me parece ya no que el destino sea cruel, sino que desvaría. Y la crueldad la acepto pero el desvarío es algo que "in- aprecio". Despreciar implica reconocer y rechazar... Yo simplemente paso.

No voy a levantar muertos de sus tumbas pero tampoco voy a enterrar a nadie. Haré como si nada. Como que el resto de gente no se hubiera enterado de la película y yo si.
Como con Lemmy. La muerte como tal no le pega... yo me erijo en extraño receptáculo de ambos.

Me parece una decisión estúpida por parte del jefe... honestamente. Creo que el jefe se ha podido equivocar y ademas haber metido la pata hasta el fondo. Yo sirvo a esta empresa y haré lo que mi responsabilidad me dicte. Pero tal como digo una cosa digo otra.
Y los jefes, se equivocan. A veces las equivocaciones son necesarias. Otras veces squivocarse es inadmisible.
Dirime en cual de las dos te hallas. No es mi trabajo, es el tuyo. Yo me preocupo de hacer bien mi trabajo.